#5 - Lo que un escriba medieval y un diseñador digital del siglo XXI tienen en común
Desde los códices medievales hasta las interfaces web, exploramos cómo las retículas han dado orden al diseño a lo largo de la historia.
El origen de las retículas: de manuscritos a la imprenta
La necesidad de organizar y estructurar la información ha sido una constante en la historia de la humanidad. Es en la elaboración de los manuscritos medievales, creados entre la caída del Imperio Romano y la invención de la imprenta en el siglo XV, donde empezamos a ver la utilización de líneas guías para asegurar una disposición uniforme del texto y las ilustraciones. La elaboración de estos libros era todo un proceso artesanal que podía tardar años.
Con la invención de la imprenta por Johannes Gutenberg en el siglo XV, la producción de libros se aceleró y estandarizó. A diferencia de los manuscritos hechos a mano, que ofrecían una libertad más orgánica en la disposición del texto, la imprenta requería un sistema visual mucho más preciso y repetible. Al imprimirse en grandes cantidades, había que garantizar que el diseño fuera consistente y funcional, lo que llevó a la creación de sistemas de organización visual más sofisticados.
Uno de los avances clave en esta nueva era fue la incorporación de proporciones matemáticas en el diseño de las páginas. La necesidad de una maquetación coherente llevó a la introducción de sistemas geométricos que permitieran estructurar las páginas de forma eficiente y armónica. Así, nacieron las primeras formas de retículas, como el sistema de Van de Graaf, que dividía la página en proporciones matemáticas para garantizar márgenes equilibrados y una distribución ordenada del contenido, proporcionando una estructura visualmente armónica y elegante.
Aunque este sistema fue documentado en el siglo XX por el tipógrafo J.A. Van de Graaf, tiene raíces mucho más antiguas. Sus principios geométricos guardan una estrecha relación con los estudios y bocetos de Villard de Honnecourt, un maestro medieval del siglo XIII conocido por su cuaderno de bocetos, una colección de dibujos y anotaciones que ilustraban principios de geometría aplicados a la arquitectura y al diseño de manuscritos. Sus estudios se centraban en cómo estructurar el espacio de manera armónica utilizando proporciones matemáticas y simetría.
De la imprenta a la tipografía moderna
En la Primera Guerra Mundial, siendo Suiza un país neutro en el conflicto, se convirtió en el punto de encuentro de los creativos de la época. Se necesitaba imprimir carteles y libros en los cuatro idiomas principales: francés, italiano, alemán e inglés. Esto presentaba un problema, ya que son idiomas que tienen bastantes particularidades tipográficas: el alemán, por ejemplo, tiene un promedio de casi 12 letras por palabra, es un idioma muy complicado de encajar en una retícula tan rígida como la definida por Honnecourt.
La Escuela Suiza de Diseño, también conocida como Estilo Tipográfico Internacional, promovió un enfoque más modular y flexible al diseño gráfico, alejándose de la rigidez que había caracterizado los primeros sistemas de la imprenta.
Diseñadores como Josef Müller-Brockmann y Max Bill, entre otros, empezaron a aplicar retículas modulares que no solo buscaban una organización funcional, sino que también permitieran una mayor expresión visual dentro de una estructura ordenada.
Estos sistemas de retículas, basados en la progresión matemática, seguían utilizando principios como la proporción áurea, pero de una forma más dinámica y asimétrica.
Los elementos no estaban distribuidos en celdas uniformes; en su lugar, los módulos podían variar en tamaño, siempre dentro de un marco que garantizaba equilibrio visual.
La transición de la retícula en el diseño digital: de lo impreso a lo interactivo
A medida que avanzaba el siglo XX, las retículas ya no solo se aplicaban al papel impreso. En la era digital, las retículas encontraron un nuevo campo de aplicación: el diseño de interfaces web y productos digitales. Al principio, el diseño digital adoptó los principios de la retícula tradicional, pero con el tiempo, la flexibilidad de las herramientas digitales permitió adaptarlas para crear diseños más adaptativos.
Las primeras páginas web seguían un formato similar al de los diseños editoriales tradicionales, utilizando retículas fijas para estructurar el contenido. Sin embargo, a medida que la web evolucionó y el diseño de interfaces se hizo más interactivo, los sistemas de retículas también se transformaron. La necesidad de que los sitios web fueran visualmente atractivos y funcionales en diferentes dispositivos llevó al desarrollo de retículas modulares y flexibles, que podían ajustarse dinámicamente a cualquier tamaño de pantalla.

Aunque las retículas pueden parecer restrictivas, en realidad ofrecen una base sólida sobre la cual se puede innovar ya que, al igual que hizo la Escuela Suiza de Diseño, la clave está en encontrar una retícula que nos ayude a llevar a cabo el diseño que el proyecto requiera y no que este sea un limitante.
Las reglas hay que conocerlas para saber romperlas y esto forma parte de la madurez del diseñador, el saber cuándo debe usar una retícula más rígida y cuándo una que le permita ser flexible y crear unos diseños más dinámicos.
Las retículas han evolucionado con el tiempo, pero su propósito sigue siendo el mismo: dar orden al caos visual. Desde los manuscritos medievales hasta el diseño digital, siguen siendo una herramienta esencial para estructurar la información con claridad y armonía.
Gracias por sentarte conmigo en este círculo. Nos leemos en la próxima edición. ✨
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Enlaces de interés
Si te has quedado con ganas de profundizar más en las retículas, te dejo los siguientes enlaces:
The Swiss Grid → Una exhibición en la Poster House de Nueva York sobre la Escuela Suiza de diseño y las retículas que llevaron a formato digital. Las transiciones fluidas de la web hacen que te sientas viajando por ella.
Explicación del método de Van del Graaf
Los grids de Obys Agency → Una web de una agencia en donde muestran de manera muy dinámica los principales grids que usan y cómo los usan.
Bibliografía
Los enlaces que han sido consultados para la redacción de este post.
"El uso de retículas en los diseños de impresión". Pixartprinting → https://www.pixartprinting.es/blog/reticulas/
"Historia de la retícula en el diseño moderno". Prezi → https://www.pixartprinting.es/blog/reticulas/
"La retícula en el diseño UX/UI: qué es y cómo se utilizan". uiFromMars. → https://www.uifrommars.com/mejora-tu-diseno-ui-utilizando-reticulas/
Lo que aprendo yo contigo siempre, Marta. Echaba mucho de menos mi news favorita. Eres ENORME, amiga❤️
Me ha encantado leer este texto porque veo conexiones con otros ámbitos, como el urbanismo. Sería interesante explorar si el uso de retículas sigue patrones similares a distintas escalas. Es fascinante ver cómo ciertos principios pueden trascender desde el diseño de un libro hasta la planificación de una ciudad.